· Más de la mitad de pequeñas y medianas empresas de Cataluña se acogeran a un ERTO

La crisis del coronavirus sigue percutiendo agresivamente en la economía española, y en consecuencia a la catalana. Dentro del contexto actual, el Gobierno ha aprobado una serie de medidas para contrarrestar esta crisis, pero de momento se consideran insuficientes, y sobre todo desde las Pymes se piden otras soluciones que la de utilizar ERTOs.

El día 30 de marzo se contabilizaron más de 70.000 empresas que emplearon la medida, con la repercusión que esto supone con más de 528.000 personas afectadas en todo Cataluña. La situación causada por el COVID-19, ha convertido en protagonista absoluto a los ERTO. Pero, ¿qué es un ERTO? ¿Qué efectos tiene llevarlos a cabo por parte de las empresas?

 

ERTO

Un ERTO és un Expediente de Regulación Temporal de la Ocupación. Como bien dice la definición, un ERTO no es un despido sino una suspensión temporal del contrato con derecho a paro. En el caso de los ERTO por fuerza mayor que entran por decreto en el caso del coronavirus, una de las principales condiciones para las empresas que lo lleven a cabo es mantener la ocupación del trabajador durante al menos seis meses una vez acabado el proceso; sino, la empresa tendrá que devolver las ayudas que le otorga el Estado.

Según los últimos datos que se tiene desde el Departamento de Empresa de la Generalitat de Cataluña, el día 30 de marzo se contabilizaron más de 70.000 empresas que han utilizado ERTOs, con la afectación directa de 528.120 trabajadores.

Por lo tanto, los ERTOs no son una solución agradable por las empresas, pero sí necesaria para salvaguardar económicamente la continuidad de cada empresa. El problema es que las medidas que está llevando a cabo el Gobierno Español no se están ajustando a la que se requiere desde las patronales.

 

Medidas requeridas

Para empezar, los ERTOs se tendrían que declarar en su totalidad de fuerza mayor, de este modo se tendría la exoneración del 100% de las cuotas de la Seguridad Social y la empresa no tendría un gasto considerable para aplicar el ERTO. Según los datos de la Generalitat, solo 2.000 expedientes se han considerado de fuerza mayor.

Del mismo modo, desde las patronales se pide una mayor compensación por la pérdida de ingresos que tendrán todas las empresas durante el confinamiento, que no se sabe cuando se acabará ni cuando se podrá retomar la actividad laboral con normalidad. Siguiendo estas medidas se podría generar un contexto próspero para las empresas y donde pudieran afrontar este periodo de confinamiento con la seguridad que sus empresas tendrán continuidad cuando la situación del coronavirus se haya estabilizado.